El italiano Valentino Rossi (Yamaha YZR M 1) tiene un difícil compromiso este fin de semana en Le Mans, escenario del Gran Premio de Francia de MotoGP, trazado en el que no gana desde 2008, para defender los dos puntos de ventaja que acumula sobre su propio compañero de equipo, el español Maverick Viñales, en la tabla provisional del campeonato y los cuatro respecto a Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V).

El nueve veces campeón del mundo de MotoGP y líder en la presente temporada tras los cuatro primeros grandes premios ha conseguido ser el más rápido de entrenamientos en Le Mans en cuatro ocasiones, la última de ellas en 2010 y antes en 2002, 2003 y 2005, además de haber ganado en tres ocasiones en el mítico y cinematográfico circuito francés (2002, 2005 y 2008), pero la situación en la presente campaña se le presenta mucho más complicada.

Rossi todavía no ha ganado ningún gran premio en lo que va de año, pero su regularidad, salvo por el "pinchazo" que sufrió en Jerez de la Frontera, en donde no pudo pasar de la décima plaza con muchos problemas con los neumáticos de su Yamaha YZR M 1, le ha permitido ser líder del campeonato desde la segunda carrera, si bien todo parece presagiar que en Le Mans se puede producir un cambio.

El trazado francés ha sido históricamente un coto casi exclusivo para los pilotos españoles, que ganan en ese escenario de manera ininterrumpida desde 2009 -solo en 2011 se impuso el australiano Casey Stoner (Repsol Honda RC 212 V)-, con Jorge Lorenzo como líder destacado con cinco victorias (2009, 2010, 2012, 2015 y 2016), seguido con una por Dani Pedrosa (2013) y Marc Márquez (2014).

No obstante, no parece que Jorge Lorenzo, a pesar de su primer podio con la Ducati Desmosedici GP17 en Jerez de la Frontera -tercero-, esté en disposición de optar a la victoria, aunque en la primera carrera española dejó claro que en aquellos circuitos en los que rueda "cómodo", pueda producirse la sorpresa.

Habrá que dar un "voto de confianza" a las posibilidades de Jorge Lorenzo en Le Mans, pero las estadísticas parecen mucho más favorables a los pilotos de Yamaha, si el nuevo compuesto de neumáticos delantero les permite brillar con lo hicieron en los test tras el Gran Premio de España o si, por el contrario, son los pilotos de Repsol Honda quienes vuelve a protagonizar un doblete sobre el podio.

Márquez, que se encuentra a solo cuatro puntos de Rossi, tiene una oportunidad seria de doblegar al transalpino, como también el compañero de equipo de este, Maverick Viñales, que acabó muy disgustado la carrera de Jerez de la Frontera, pero un día más tarde, con nuevos neumáticos, se colocó en lo más alto de la clasificación por tiempos.

Ellos deben ser los protagonistas de la carrera francesa; en la que una vez más dependerán de su estado de ánimo y, sobre todo del rendimiento de la Ducati, para que estén en la pelea por la victoria o el podio tanto Jorge Lorenzo, que llega a uno de sus circuitos talismán, como el italiano Andrea Dovizioso, quien no ha ganado nunca en Le Mans pero se ha subido en tres ocasiones al podio (2010, 2011 y 2015).

El fulgurante inicio de temporada y su rendimiento como debutante con la Yamaha YZR M 1, además de su condición de local, confiere al francés Johann Zarco una atención especial, pues la sexta plaza que ocupa en el campeonato con un cuarto puesto como mejor resultado, no le hacen justicia al piloto de Cannes, que ya en más de una ocasión ha optado, merecidamente, a las posiciones de podio.

Tras él en el campeonato, otro de los pilotos que en cualquier momento puede volver sobre el podio -tercero en Termas de Río Hondo-, el británico Cal Crutchlow (Honda RC 213 V), aunque en su caso lo más lógico es que acabe luchando en un segundo plano junto al alemán Jonas Folger (Yamaha YZR M 1), el italiano Danilo Petrucci (Ducati Desmosedici GP17), el australiano Jack Miller (Honda RC 213 V) o los españoles Aleix Espargaró, en constante progresión sobre su nueva Aprilia RS-GP, o Álvaro Bautista (Ducati Desmosedici GP16).

No estará en Francia el lesionado Alex Rins, quien en esta ocasión verá cubierta su plaza con el local Sylvain Guintoli -campeón del mundo de Superbike en 2014 con Aprilia-, aunque la falta de entrenamiento en la categoría de MotoGP, que no disputa desde 2011, le obligará a un esfuerzo renovado para intentar obtener un buen nivel de participación.

Pol Espargaró tendrá una nueva oportunidad para avanzar en el rendimiento de su novísima KTM RC 16, mientras que Héctor Barberá (Ducati Desmosedici GP16) y Esteve "Tito" Rabat (Honda RC 213 V) necesitan dar un paso adelante en la clasificación por encontrarse muy por detrás de las expectativas que habían suscitado durante la pretemporada.
..EFE