El equipo de A.J. Hinch tuvo un balance de 9-24 en las primeras cinco semanas del Play Ball. Pero luego de tocar fondo en el segundo mes al tener su peor marca en la temporada, 15 juegos por debajo de .500 el 7 de mayo, empezaron a jugar buen béisbol. Los Tigres de Detroit, terminaron junio con un récord de 14-13 récord idéntico al de mayo, resultados que volvieron a generar aires positivos.

Lo lograron jugando contra equipos con registros ganadores. Se llevaron por ejemplo, series contra los Astros de Houston y barrieron a los Yankees de Nueva York en casa. Además, el equipo viene de una serie de victorias contra rivales de división. La resistencia, llegó a definir a este equipo al sobrevivir o más bien, revivir en ese tramo difícil del calendario.

Si bien, cualquier equipo puede tener un mes ganador. Pero cuando se trata de Detroit, un equipo que finalizó con récord de 23-35 en 2020, terminando de últimos en la División Central de la Liga Americana por tercera vez en cuatro años, es un gran paso hacia la dirección correcta.

A este punto se recuerdan las palabras del estratega A.J Hinch cuando expresó en una entrevista exclusiva con Dan Dickerson que cuando hay preparación, empiezas a ganar juegos, luego a ganar series, empiezas a tener semanas ganadoras y luego meses.

En el deporte no hay nada mejor que ganar y la fanaticada de los Tigres no había tenido esto en años. Por ejemplo, significó mucho ver a Spencer Turnbull lanzar en mayo el octavo juego sin hits en la historia del equipo en Seattle.

Ahora bien, los cuatro juegos contra Minnesota antes del receso del Juego de Estrellas, pudieron ser claves para acercarse al soñado segundo lugar de la División Central, pero los Mellizos barrieron la serie.

Sin embargo, si el terrible inicio de temporada no definió al equipo de Detroit de este año, esta barrida no debería representar mayor problema, especialmente en el deporte más impredecible del mundo. Aún tienen la oportunidad de crecerse en julio, tener su tercer mes consecutivo con victorias y por qué no, conseguir llegar a .500 por primera vez en cinco años. Y es que, sus próximos 17 partidos serán contra los cuatro equipos más débiles de la Liga Americana: los Mellizos de Minnesota, los Rangers de Texas, los Reales de Kansas City y los Orioles de Baltimore.

La pregunta es, si el equipo tiene la suficiente profundidad en sus jugadores de posición para absorber lo que vendrá los dos meses siguientes a Julio. La primera serie de agosto es ante los Medias Rojas de Boston. Y la verdad es que, a pesar de la evolución, la defensa de los Tigres sigue siendo una de las más débiles del béisbol. Por lo que el pitcheo, debe ser clave en los juegos.

Lo que sucede es que la rotación de los Tigres, tuvo un buen balance en los últimos dos meses, pero actualmente, tienen a varios lanzadores importantes en la lista de lesionados entre ellos: Julio Teherán, Matthew Boyd y Spencer Turnbull.

Esto ha complicado bastante al equipo, pero es justo destacar que está Tarik Skubal, Gregory Soto, en su mejor temporada y quien será el único representante del Detroit en el Juego de Estrellas, José Ureña, y los novatos Casey Mize y Matt Manning actualmente, en el escuadrón de taxis. Y todos, han cargado con un gran peso.

Además, los Tigres de Detroit todavía luchan por producir daños constantes en el plato. Asi que es importante que en este tramo, los experimentados Eric Haase, Jonathan Schoop y Robbie Grossman combinándose con jóvenes como Akil Baddoo conviertan más carreras para construir ventajas que aligeren la carga de estos brazos jóvenes.

- El Tigre Mayor
Cuando se habla de los Tigres de Detroit, es imposible no nombrar a Miguel Cabrera. Junto al equipo, el venezolano despertó en el mes de junio. El mánager A.J Hinch lo ha sabido usar para que se mantenga alejado de molestias y cada batazo que ha dado, ha sido oportuno tanto para el equipo, como para sus récords. Miguel Cabrera, está a solo 6 cuadrangulares de los 500 y a 73 hits de los 3000. Cada batazo del veterano de los Tigres de Detroit, es historia. Rumbo a donde todos esperan que esté en unos años, Cooperstown.

- La reconstrucción de la mano de A.J. Hinch
El equipo de A.J. Hinch tiene récord de 40-51 ubicándose en el tercer lugar de su división con lo Mellizos, (39-50) queriendo pelear la posición. Lo cierto es que, se van al descanso con sabor amargo, serán días necesarios para ajustar y mirar nuevas piezas.

A este punto, pareciera que siguen estando lejos de los líderes de su división, pero como en el béisbol los detalles son importantes, si analizamos, en los últimos dos meses cuando el equipo ha sido derrotado en el primer juego de una serie, ha encontrado la manera de responder, incluso contra dos de los mejores equipos de la liga. El mánager y sus entrenadores, están poniendo a sus jugadores en posición de ganar.

Es bueno recordar que los Astros promediaron 104 derrotas en los cuatro años antes de la llegada de A.J Hinch y todo empezó a cambiar en la primera temporada de Hinch, 2015, cuando ayudó a guiar a Houston a su primera aparición en postemporada en 10 años.

Los Tigres de Detroit tienen una mezcla de talento joven junto con veteranos. Si bien, Hinch está empezando desde cero con una organización que no ha salido del fondo durante años y saber usar estas piezas les permite soñar con volver a ser ese equipo ganador que compite por el banderín en la División Central de la Liga Americana. Mejorar toma tiempo, pero ya los Tigres están empezando a desarrollar una mentalidad más fuerte, por lo que permite mirar el resto de la temporada con mejores expectativas.
..María Virginia Álvarez / @SoyMV_

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