Un día como hoy, habría movimiento en los campos de entrenamientos primaverales de las Grandes Ligas. Cada año, los primeros en presentarse son los pitchers y catchers. El sol los acostumbra a recibir en su máximo esplendor, eso significa que el invierno va quedando atrás.

También, suelen acercarse aficionados a los establecimientos de Florida y Arizona para ver el trabajo colectivo que allí se hace. Habrían sonrisas y reinarán las ganas de hacer el trabajo cada vez mejor para superar las actuaciones del año anterior. En cada rincón, se sentiría esa ilusión única que genera que lo mejor está por venir, el playball oficial.

Hoy, todas esas sensaciones están en pausa debido a un cierre patronal instituido por los propietarios el 2 diciembre del 2021. Si, luego de que en el 2020 la pandemia por covid-19 paralizara el béisbol y trajera como resultado, una temporada recortada. Aquí estamos de nuevo.

Los jugadores no han tenido éxito en la búsqueda de un cambio en el sistema que los respalde desde el principio. Las propuestas de la MLB no parecen ser efectivas para la forma en la que la MLBPA desea que opere la economía del béisbol en pro del futuro de quienes entregan parte de su vida, a este deporte.

We want a system where threshold and penalties don’t function as caps, allows younger players to realize more of their market value, makes service time manipulation a thing of the past, and eliminate tanking as a winning strategy.

— Max Scherzer (@Max_Scherzer) February 4, 2022

Ambas partes consideran que la otra, no ha planteado una propuesta justa. En diciembre se decía que habría tiempo suficiente para llegar a un acuerdo, eran dos meses que parecían demasiado, pero de pronto, llegó la hora y aún no hay trato, ni Spring Training. La última vez que esto sucedió fue en el año 1995.

El sábado pasado, la oferta de la liga no cumplió con las expectativas de la Asociación de Peloteros. Algunas de las cosas que se plantearon en la última reunión fueron las siguientes: MLB ofreció un aumento del salario mínimo a $725,000, pero aún es menor al deseo del sindicato ($775,000). Y a su vez, presentaron un aumento del impuesto al equilibrio competitivo (CBT, por sus siglas en inglés) a $222 millones para 2026. La MLBPA pide $245 millones.

Una propuesta de 130 páginas no se asimila en dos horas, pero el sentimiento general de peloteros es que en propuesta del sábado: El impuesto a nóminas es peor que en anterior pacto, no se enfrenta manipulación de tiempo de servicio y pequeños aumentos del salario mínimo.

— Enrique Rojas/ESPN (@Enrique_Rojas1) February 12, 2022

El inicio de la temporada está previsto para el 31 de marzo y de no encontrar un acuerdo por el nuevo Contrato Colectivo en las próximas semanas, podría postergarse. Lo que sería otro golpe fuerte para las Grandes Ligas tras venir de recuperarse de esa temporada de 60 juegos en el 2020.

Hasta el momento, la próxima sesión entre MLB y MLBPA no ha sido programada. Sentarse en una mesa a discutir temas económicos en una industria tan grande y poderosa, puede generar aún más tensión sobre todo, en la opinión pública. Lo que sucede es que, el tema es mucho más complejo, va más allá de un tema salarial y ambas partes, están firmes en su posición de reivindicar sus puntos.

A los que están desde afuera, les toca cruzar los dedos, y esperar esa justa y sensata propuesta que conduzca a un solo lugar, el campo de juego. Los jugadores como siempre, están entrenando por su parte, así lo hicieron durante la pandemia. Son atletas, estarán listos cuando el momento llegue porque si, las negaciones más temprano que tarde deben llegar a un acuerdo.

Y que todo sea por el bien del béisbol.
...María Virginia Álvarez// @soymv
Fotos: Agencias

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