Con el regreso de Fernando Gago, el bicampeón Boca Juniors igualó 3-3 a domicilio con Huracán el sábado, en un vibrante partido correspondiente a la 27ma y última fecha de la liga argentina de fútbol.

Boca ya se había asegurado el miércoles el cetro del torneo local por segundo año consecutivo al empatar 2-2 con Gimnasia y Esgrima en La Plata, en un partido pendiente.

Gago jugó en primera división luego de una ausencia de siete meses por la ruptura del ligamento cruzado anterior y el ligamento lateral interno de su rodilla derecha, producida en el cotejo Argentina-Perú por las eliminatorias mundialistas.

Frente a Huracán, el volante —de aceptable desempeño— ingresó como titular y fue reemplazado a los 68 minutos.

"¿Con la selección? No, sueño con jugar", afirmó en relación a sus expectativas de integrar la lista de la Albiceleste en el Mundial de Rusia.

Para medirse con Huracán, el entrenador Guillermo Barros Schelotto presentó un equipo alternativo, debido al definitorio partido que Boca disputará ante Alianza Lima el miércoles en La Bombonera, en el que se jugará su pase a los octavos de final de la Copa Libertadores.

Con el empate, Huracán —que bajo el mando del técnico Gustavo Alfaro empezó la temporada con el objetivo de salvarse del descenso y la terminó encaramado en los puestos de arriba— depende ahora de otros resultados para clasificar a la Libertadores 2019. En su defecto, disputará la Copa Sudamericana del año próximo.

En el estadio Tomás Ducó, Huracán y Boca se alternaron el mando en un partido de ida y vuelta. El local dominó la primera mitad de la etapa inicial, lapso en el que se puso 1-0 con un tanto de Ignacio Pussetto a los 4 minutos y dispuso de otras chances claras para duplicar la ventaja.

Sin embargo, Boca lo igualó en una ráfaga. La visita marcó a través de Emmanuel Mas, a los 32; Walter Bou, a los 34, y Óscar Benítez, a los 43.

El "Globo" despertó en el complemento, aprovechando una merma física de su rival. Diego Mendoza descontó a los 63 y el sustituto Andrés Chávez, ex de Boca, niveló a los 72. Desde entonces hasta el final, el anfitrión buscó denodadamente y sin éxito una victoria que le asegurara el pasaporte a la próxima Libertadores sin depender de otros resultados.

En caso de que Independiente, que visita el sábado por la tarde a Unión de Santa Fe, y Talleres de Córdoba, que hará lo propio ante Olimpo en Bahía Blanca, ganen sus respectivos partidos, Huracán perderá esa plaza y jugará la Sudamericana 2019. Lo mismo sucederá si triunfa uno de ellos y también lo hace Racing Club el lunes, cuando reciba a Colón de Santa Fe.

El campeón Boca, el escolta Godoy Cruz y San Lorenzo, tercero en las posiciones, ya tienen boleto sacado para la Libertadores del año próximo.
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