Con el sismo de la Superliga, quedaron en evidencia ciertas tendencias y manifestaciones, unas visibles, otras ocultas, con intereses de un lado y de otro, obviando lo verdaderamente importante del tema, que es la sostenibilidad, supervivencia y rentabilidad del fútbol en el tiempo, especialmente si se quieren mantener los niveles de excelencia, espectáculo, jugadores, estadios, y sobre todo, la trascendencia deportiva de los mejores clubes de la historia del futbol europeo y mundial.

Ahora bien, ¿Qué nos ha dejado la Superliga?
La UEFA sabe que el foco a la transparencia de la gestión lo ha puesto el presidente del Real Madrid, lo que obliga a la institución de Aleksander Čeferin a tomar medidas y a negociar con todos los actores del fútbol europeo.

Por otra parte, el máximo organismo del fútbol europeo debe adaptarse a los cambios y tener claro quiénes son sus clientes reales, ya que la UEFA es un medio y no un fin.

La crisis generada por la Superliga, marcará un antes y un después, que continuará una lucha dialéctica entre los opuestos, en la que debatirá sobre la calidad de las competiciones, la cantidad de los partidos, el nivel del espectáculo y el modelo de negocio de los equipos para su gestión.

Otro aspecto relevante y que será difícil de manejar en el futuro, es la injerencia que han tenido diversos gobiernos europeos en el desarrollo de la Superliga, con pronunciamientos y acciones contundentes, pese a la prohibición de la FIFA sobre la intervención e intromisión de la política en el fútbol.

Todos sabemos que el partido se termina cuando se llega al último minuto de juego y que "Noventa minuti son molto longos", como decía el inolvidable Juanito.

Lloverá y escampará.
..Arturo G. Mengual / @arturogmengual

*Últimos artículos de Opinión en Conexión Deportiva

Suscríbete a nuestro nuevo canal de Telegram y recibe, de lunes a domingo, las noticias más importantes del día del mundo del deporte. Además, también puedes seguir nuestro perfil en Instagram, Facebook, Youtube y Twitter.