Solo basta acercarse a los alrededores del Comerica Park, estadio de los Tigres de Detroit, para ver a niños, jóvenes y adultos llevar el número 24 en la espalda. Todos, van a ver jugar a su ídolo. Y cuando Miguel Cabrera camina desde el circulo de espera hacia el plato, la frase “Hall of Fame” (Salón de la Fama) empieza a escucharse.

Pareciera que no hubiese un mejor lugar para él que un terreno de juego, esa impresión la ha dado siempre. Incluso, aún con dolor, lo hemos visto pararse en el plato y hacerle swing a la pelota. No solo es el mejor bateador venezolano, es uno de los mejores bateadores de la historia de las Grandes Ligas. Y lo cierto es que, no necesita más batazos para dirigirse a Cooperstown, pero los grandes jugadores, llegan a un momento donde cada jugada es otra página en los libros de historia. Páginas que todos queremos que el último ganador de una Triple Corona de bateo, siga escribiendo.

En su primer juego de la temporada 2021, conectó un espectacular jonrón en medio de una nevada en la ciudad de Detroit y demostró, que pese a las lesiones que lo acompañan desde las últimas campañas, estaba listo para buscar los 3.000 hits y 500 jonrones, y convertirse en el séptimo pelotero de la historia en lograrlo.

A principio de temporada esos números se veían más lejos. Pero, el venezolano está teniendo un muy buen momento. Esta semana, se colocó a tan solo un hit del Salón de la Fama Willie Keeler y con 2.931 imparables, se ubica en el puesto 38 de todos los tiempos. Una vez alcanzado ese hit, vendrá otro nombre: Barry Bonds. El líder jonronero en la historia de las Grandes Ligas.

El sábado pasado ‘Miggy’ conectó un sencillo y dejó en el terreno a Minnesota, el domingo llegó otro hit y el lunes, se fue de 4-2 con 5 carreras impulsadas. El primer objetivo del venezolano, es mantenerse saludable. Cabrera se ve cómodo cuando se para en el home y no solo eso, se ve alegre y de buen ánimo. Está disfrutando cada batazo, al igual que los amantes de este juego.

En esta temporada 2021, ha dejado atrás nombres históricos como Babe Ruth, Mel Ott, Al Simmons, y Rogers Hornsby. Además, con esos tres juegos seguidos conectando imparables, acumuló 1.768 carreras impulsadas, igualando a David Ortiz en el puesto 22 de la historia. Y por supuesto, está cada vez más cerca de formar parte del selecto club de los 500 jonrones, a tan solo 6 de ese número.

Dicen que, para alcanzar esas cifras, tuviste que pararte en el plato muchas veces. Miguel Cabrera, suma 19 temporadas en las Grandes ligas. Ha ganado dos MVP, siete bates de plata, cuatro títulos de bateo y ha sido invitado 11 veces al Juego de Estrellas. No todos los peloteros logran consolidarse y trascender como lo ha hecho el venezolano.

Cabrera seguirá sumando números porque nació para esto, y nosotros, seguiremos escribiendo sobre cada una de sus hazañas. Así que la respuesta sobre cuando llegarán los 3.000 hits y 500 jonrones, es lo de menos porque cada vez que Miguel Cabrera se para en un plato, es historia.
..María Virginia Álvarez / @SoyMV_

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